Arder

Siempre he pensado que las normas están para que alguna persona venga y las rompa, pero nunca me he considerado a mi misma una de ellas… hasta que te conocí a ti.

En ese justo momento, las pocas reglas que todavía se mantenían erguidas en mi cabeza, empezaron a tambalearse, y lo único que yo quería hacer era derrumbarlas para así poder usarlas de escalón hasta tu boca, aquello que yo tanto quería pero que tenía prohibido. 

Desde el momento en el que el mar de tus ojos chocó con las montañas de los míos supimos que algo grande iba a pasar entre los dos, que íbamos a pecar juntos; pero ya sabes eso que dicen: el infierno solo te quema cuando nunca ante te has quemado, y después de aquella tarde en mi habitación en la que rompimos normas, voces y esperas, no creo que debamos preocuparnos nunca más por pasar ese calor. 

Así que, ahora, sabiendo que ya estamos condenados para siempre, ¿ por qué no te vienes conmigo, allí donde se inició el fuego y terminamos de ardernos?

Dias

Hay personas que son días de la semana.

Hay personas que son lunes, que parecen los peores, que de normal la gente no se acerca mucho ellos, pero cuando lo haces descubres personas que te dejan sin palabras.

Hay personas que son martes, que parece que cuando se juntan con X cosas (como los martes y el número 13) todos los suyos, por mala suerte, cuando en realidad deberían ir buscándolos.

Hay personas que son miércoles, que todo el mundo tiene que tener al menos uno de su vida, para poder llegar a ese final y a esa persona que ellos quieren.

Hay personas que son jueves, que tienen esa chispa de luz que todos necesitamos cuando nos estamos ahogando en la oscuridad.

Hay personas que son viernes, que son aquello que esperas, por lo que luchas con una de carne y que nunca dejarás que nadie te arrebate.

Hay personas que son sábado, que los mires por donde las mires brillan, que irradian alegría, que hacen que sucedan las cosas más inesperadas.

Hay personas que son domingo, con las que estar toda una tarde (o quizá toda una vida) sin salir del sofá, bajo la manta y viendo una película.

Ojalá descubras que día de la semana es el que mas te conviene, porque yo sé que es lo que a mí me conviene: tú.

Refugio

Qué bonito es el sentimiento de encontrar refugio en unos brazos ajenos, ya sabes encontrar un sitio donde estás a salvo después de la tormenta, donde puedes pasar la lluvia sin tener ningún miedo a mojarte, que nos da calor en invierno (y también en verano), que es tu armadura contra los males….

Yo no sé si tú habrás encontrado el tuyo, pero ojalá puedas ser el mío.

Tranquilo

Que pena que lo nuestro haya terminado incluso antes de empezar. No te hagas el sorprendido, sabes muy bien porque lo digo, porque veo como la miras a ella y como te mira ella a ti, veo como recorres su cuerpo de la manera que solías recordar el mío, veo esa sonrisa tan sencilla y primitiva que te sale cuando la pillas mirándote…

Tu tranquilo, yo no te culpo, todos sabemos que no elegimos de quien nos enamoramos. Tan solo desearía que nuestro hubiera podido empezar antes, empezar de la misma manera en la que empiezan las explosiones, con mucha fuerza y haciendo ruido (Un ruido como el que siempre nos quedará pendiente hacer).

Tu tranquilo, te puedes ir con la conciencia muy tranquila, porque aunque a mí me duele verte de su mano en vez de la mía, hay una cosa que yo se, Y que ella ni se imagina: ella, aunque pase el tiempo, nunca llegará a estar tan dentro de ti como estuve yo, y eso que lo nuestro nunca llegó a empezar.

Lugares favoritos

Creo que al igual que todo el mundo encuentra a su persona favorita, deberíamos encontrar un sitio favorito para estar. Ojo, que no hablo de tu ciudad favorita, de tu montaña favorita o de tu playa favorita, hablo de un lugar en especial en el que te encuentres cómodo, un lugar donde puedes pasarte horas y horas haciéndolo todo o haciendo nada, en el que te puedes perder para luego encontrarte, en el que no pasa el tiempo, que todo sigue igual que aquella primera vez que fuiste…

Ojalá todos lo encontremos, porque es tan difícil de encontrar como una persona favorita lo es. Obviamente mientras estás leyendo esto, un lugar ha saltado a tu mente y tu has dicho: “este es mi lugar favorito”. Pues bien, yo te figo que ese lugar que tu piensas que es tu favorito en realidad no lo es, simplemente porque cuando piensas en un lugar favorito, así a la ligera, tendemos a pensar en un sitio que hayamos visitado y que nos haya impactado o gustado mucho, pero eso no encaja en la definición de lugar favorito que yo he dado previamente.

Así que, nos toca recorrer mundo, buscar en los rincones más pequeños e inhóspitos, no dejar un solo trozo de la tierra sin recorrer, porque, si te lo dejas, posiblemente sea ahí donde esté escondido tu lugar favorito.

Realidades

Lo que hay ahora es la única realidad que tenemos. Da igual que no nos guste, que pensemos que en verdad nos merecemos una realidad mejor, que pensemos que es demasiado buena para nosotros, que la encontremos perfecta… esto es lo único que tenemos. Eso sí, lo único que tenemos ahora. Es muy necesario que las personas hagamos hincapié en el ahora, porque esto significa que, aunque esta realidad sea la que tenemos ahora, no significa que será la realidad que tendremos siempre, que no se pueda cambiar.

Las realidades, todas las realidades, están para cambiarlas, para dibujar unas nuevas, para luchar por tener la que nosotros queremos, para trabajar por ellas, para llorar cuando vemos que la encontramos demasiado lejos o que es demasiado irreal… Las realidades están aquí para que nosotros elijamos cual es aquella que queremos llevar acabo, aquella que más nos defina, aquella que nos gusta, etc., pero sobre todo están para tenerlas en el futuro, y saber que esa realidad es todo lo que realmente tenemos.

Razljubit

Que curioso eso de que cuando dejamos a una persona, o no dejarla simplemente alejarnos de ella, siempre queda un recuerdo, un sentimiento, que haga que nunca llegue de irse de nosotros. 

Puede ser que ese sentimiento sea alegría, porque estas viendo como esa otra persona sigue siendo tal cual tu la recuerda; puede ser un sentimiento de rabia, porque no sabes el motivo por el cual ahora va de otra mano; puede ser un sentimiento de nostalgia, porque echas de menos oír su risa y su voz en la noches oscuras; puede ser un sentimiento de decepción, porque ves como todo aquello que le has ayudado a conseguir se desmorona después una mala decisión; puede ser un sentimiento de frustración, porque ya no recuerdas la manera que tenían sus manos de recorrer tu cuerpo y la manera que tenía de encontrar tus lugares más secretos…

Que curioso es esa sensación que llaman Razljubit, que te hace volver a sentir cosas por personas que una vez amaste. 

Infinitud

Que pena que no seas infinitud; que pena que no vayas a estar aquí junto a mí mañana, cuando después de tanta calma se acerque la tormenta; que pena que no vaya a volver a sentir tu aliento contra el mío cuando nos separemos después de habernos fundido el uno en el otro; que pena no volver a sentir el calor de tus manos en el hueco de mis costillas, mientras acaricias mi piel, como si yo fuera ese tesoro que tú siempre has ansiado…

Que pena que la vida nos este haciendo vivir esto, después de haberlo sido todo durante tanto tiempo, mientras estábamos juntos.

Pero bueno, supongo que este es el precio que ambos tenemos que pagar: yo por intentar que tus puertas jamás se cerraran y tú por intentar cerrar las mías.